Los sindicatos son asociaciones de trabajadoras y trabajadores –pueden ser del sector público o privado- que se organizan con la finalidad de defender sus derechos laborales, así como de gestionar mejores condiciones de trabajo –a través de la firma de un contrato colectivo- incidiendo en la mejora de la calidad de la vida laboral, gremial y personal de las personas afiliadas.

Los beneficios de pertenecer a un sindicato son diversos y trascienden la posibilidad de conseguir mejores condiciones de trabajo, representa además la posibilidad de contar con respaldo de representación experta en caso de violaciones a tus derechos laborales, la pertenencia a una red solidaria y la integración a un colectivo que fomenta principios como la igualdad, la dignidad laboral, la no discriminación por género, orientación sexual, origen, edad, nacionalidad, pertenencia étnica, etc.

Aquí te dejamos un vínculo donde puedes consultar algunas buenas razones para afiliarte a un sindicato. 

Sí. Según el Artículo 357 de la Ley Federal del Trabajo (LFT) : “Los trabajadores y los patrones, sin ninguna distinción y sin autorización previa, tienen el derecho de constituir las organizaciones que estimen convenientes, así como el de afiliarse a éstas, con la sola condición de observar los estatutos de las mismas.” Si bien en nuestro contrato se nos define como trabajadores de confianza, en términos legales no lo somos. Como se señala en el Artículo 9 de la ya citada LFT, “La categoría de trabajador de confianza depende de la naturaleza de las funciones desempeñadas y no de la designación que se dé al puesto. Son funciones de confianza las de dirección, inspección, vigilancia y fiscalización, cuando tengan carácter general, y las que se relacionen con trabajos personales del patrón dentro de la empresa o establecimiento.”

En este sentido -y dado que las funciones de investigación y docencia corresponden a un puesto de base y no de confianza- las y los Catedráticos CONACYT somos trabajadores de base con un contrato por tiempo indeterminado y tenemos derecho a organizarnos sindicalmente, como lo señala la LFT.

Sí, la LFT no coloca como condicionante o requisito tener la nacionalidad mexicana para formar parte de una organización sindical en el país. Además es importante mencionar que el Siintracatedras promueve el respeto por la diferencia, reconociendo que ésta nos nutre y nos hace más fuertes.  

Tal como se menciona en su nombre, el SIINTRACATEDRAS es un sindicato independiente porque se gestó como una iniciativa de un grupo de investigadoras e investigadores de Cátedras CONACYT, quienes nos asociamos de manera libre, voluntaria, consciente e independiente para generar una representación común como trabajadoras y trabajadores, a través de una figura sindical, prevista en las normas nacionales e internacionales en materia laboral para la defensa y mejora de nuestras condiciones de trabajo, de salario y de vida.

El SIINTRACATEDRAS se ha ido constituyendo gracias a la convocatoria de pares catedráticas y catedráticos que compartimos una condición laboral, ciertas problemáticas y necesidades en este ámbito, todxs autónomxs e independientes de nuestro patrón, del gobierno o de cualquier otra asociación o partido político. De igual modo, nos consideramos independientes porque nuestro objetivo está centrado en la defensa de de nuestros intereses laborales como investigadoras e investigadores de Cátedras CONACyT, y nuestras alianzas nunca estarán con sindicatos corruptos o que sirven a los intereses ajenos a los de sus afiliadas y afiliados.

Si bien en México muchos sindicatos son corruptos, el SIINTRACATEDRAS se ha propuesto representar efectivamente a sus afiliadxs y sus intereses, para actuar a favor de nuestros derechos laborales y mejorar nuestras condiciones de trabajo. Nos reconocemos como un sindicato independiente, con principios éticos como la transparencia y la rendición de cuentas, mismas que están consideradas en nuestros Estatutos y que obligan a su Consejo Directivo Colegiado (CDC) a rendir informes semestrales sobre las acciones de sus diversas Secretarías, entre ellas las de Finanzas. En este mismo sentido, estamos construyendo los mecanismos necesarios para que todas las personas afiliadas puedan tener acceso a la información financiera y administrativa del Sindicato de manera permanente.

El interés que guía a lxs integrantes del CDC y a sus agremiadxs no es de carácter lucrativo o individual, la apuesta es trabajar para proteger, defender y mejorar nuestras condiciones laborales colectivas.

La corrupción sindical ha tenido su origen en la falta de participación activa de lxs afiliadxs en lxs sindicatos, así que el mecanismo más efectivo contra la corrupción es que todos y todas participemos activamente en las decisiones de la organización y en su estructura, cuestión que promovemos en nuestra organización sindical.

Si bien reconocemos que hay diversos grupos de Catedráticxs organizadxs con distintos fines –académicos, de colaboración y difusión del trabajo científico, entre otros-, el SIINTRACATEDRAS es el único sindicato que organiza a trabajadores y trabajadoras de Cátedras CONACYT, con capacidad legal para negociar un contrato colectivo basado en nuestras necesidades y demandas comunes, a través de mecanismos de consulta y participación horizontal.

Dicho Sindicato está conformado por trabajadores de base que realizan labores administrativas en CONACYT, no de investigación, de manera que sus condiciones y necesidades son distintas a las de las Catedráticas y los Catedráticos, quienes trabajamos en Conacyt pero realizando labores de docencia e investigación. Justamente por el carácter particular de nuestras tareas, ocupaciones e incluso metas de desarrollo, así como por las características propias de nuestra contratación -que no son las mismas de quienes trabajan en el área administrativa de CONACYT- requerimos construir y firmar un contrato colectivo de trabajo específico, que es uno de los primeros y centrales objetivos de nuestra organización sindical.

La organización sindical es un derecho humano laboral protegido constitucionalmente y considerado en la Ley Federal del Trabajo (LFT). Los patrones tienen prohibido intervenir o impedir la organización sindical, incluso la Ley prevé sanciones para quienes incurran en dichas conductas.

En la medida que no tengamos capacidad organizativa y actuemos aislados somos vulnerables. Organizarnos sindicalmente nos permite estar mejor informadxs, tener una protección legal a través de representantes que defiendan nuestros intereses y conocer mejor nuestros derechos para que, en caso de ser atropellados, sea posible su denuncia con el apoyo de una organización que actúe por el interés común.

El sindicato de Cátedras es un esfuerzo que asumimos, no por gusto, sino por necesidad, por autocuidado. El sindicato es la única posibilidad legal de negociar un contrato colectivo de trabajo que mejore nuestras condiciones laborales y dignifique nuestro quehacer científico en un contexto de permanencia no condicionada y sin jerarquías con nuestros pares. De igual modo es un mecanismo para buscar la continuidad del Programa de Cátedras, que está sujeto a disponibilidad presupuestal y por lo tanto carece de estabilidad en el tiempo.

Un aspecto fundamental para la preservación de la autonomía sindical es la estrategia de autofinanciamiento a través de cuotas sindicales. Es importante comunicar que ninguno de quienes nos hemos organizado somos expertos en sindicalismo (somos catedráticos como tú en proceso de aprendizaje), por lo que recurrimos a asesoría legal especializada: para constituir al Sindicato, registrarlo y hacer cualquier trámite ante la Secretaría del Trabajo, solucionar conflictos laborales, construir y redactar el CCT y crear una estrategia jurídica y política, así como para eventualmente negociar el CCT, etc. En esta inversión se va el 50% de nuestros ingresos. Tampoco somos expertos en comunicación (y aunque lo fuésemos, tampoco podemos descuidar nuestras investigaciones), por lo que hemos recurrido a profesionales para que nos apoyen en la creación de estrategias y campañas de comunicación. Se ha trabajado en diseños, videos, podcasts, redes sociales, compra y creación de contenido de página web y correos oficiales (host), preparación anticipada de conferencia de prensa y comunicados en medios, etc. Otros gastos menores son en correspondencia, para envío de documentos oficiales (pues hay gente del comité directivo en todo el país). Nadie de quienes constituimos el sindicato cuenta con algún tipo de salario que se desprenda de las cuotas, ni siquiera quienes tienen cargos en el consejo directivo o que participan en (sub)comisiones de trabajo. Todos los gastos son en beneficio común y se comunican a través de informes financieros periódicos a los que tienen acceso todas las personas afiliadas a la organización. En la medida en que crezcamos las cuotas sindicales estarán orientadas a cubrir programas de educación, ahorro y otros planes de bienestar común propuestos en asamblea y ratificados por decisión de la mayoría.